Son procedimientos no quirúrgicos (mini invasivos) que permiten atenuar las líneas de expresión y arrugas profundas con toxina botulínica. Devolver la textura y el volumen de la piel del rostro con ácido hialurónico.
En la región frontal (frente) glabelar (entre las cejas) y periorbitarias o perioculares (patas de gallo). Estas inyecciones en las distintas áreas, debilitan la contracción muscular y por consiguiente la formación de arrugas. La solución se inyecta con una aguja muy fina (de insulina) previa colocación de un anestésico tópico en crema (EMLA) en la región a tratar. La duración del efecto de la toxina botulínica sobre el músculo es de 6 a 12 meses, pudiendo repetirse su aplicación reiteradas veces.
- Contraindicaciones
- Efectos colaterales / adversos.
La paciente no debe estar embarazada, ni usando el ATB del grupo de los amino glucósidos como la AMIKACINA. Puede existir un pequeño edema y/o equimosis en el área tratada que solo dura unas pocas horas.
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